Huevos al Plato al Microondas
Los huevos al plato son una receta tradicional que nunca pasa de moda. Se trata de un plato humilde, económico, nutritivo y muy versátil que puede prepararse con ingredientes sencillos y adaptarse al gusto de cada persona.
Lo más sorprendente es que no hace falta usar el horno tradicional ni la sartén: con un microondas puedes tener unos huevos al plato listos en menos de 5 minutos, con todo el sabor de la cocina casera.
En esta versión moderna, te enseñaré paso a paso cómo hacer huevos al plato en microondas sin complicaciones, cómo ajustar los tiempos de cocción según tu aparato y cómo combinarlos con diferentes ingredientes para lograr sabores variados.
Tiempo total de la receta
- Preparación: 3 minutos
- Cocción: 2–3 minutos (dependiendo de la potencia del microondas)
- Tiempo total: 6 minutos
Raciones
Esta receta está pensada para 1 persona, pero puedes duplicar o triplicar las cantidades fácilmente si cocinas para más gente, siempre usando recipientes individuales.
Ingredientes básicos
- 2 huevos frescos
- 2 cucharadas soperas de tomate frito (casero o de buena calidad)
- 1 chorrito de aceite de oliva virgen extra (opcional pero muy recomendable)
- 1 pizca de sal fina
- Pimienta negra molida al gusto
Ingredientes opcionales (para personalizar el plato)
- Jamón serrano o cocido en taquitos
- Chorizo picado
- Queso rallado (tipo mozzarella, cheddar o manchego)
- Guisantes cocidos
- Atún en conserva
- Espárragos, champiñones o espinacas cocidas
- Pimientos asados o naturales
- Orégano, albahaca o perejil fresco picado
Preparación paso a paso
1. Prepara la base del plato
Coloca en el fondo de un cuenco o plato hondo apto para microondas dos cucharadas de tomate frito. Extiéndelo bien por toda la superficie para crear una capa uniforme.
El tomate servirá de base para los huevos y aportará jugosidad y sabor. Si prefieres un toque más casero, puedes usar tomate triturado salteado previamente con ajo y cebolla en una sartén, pero en esta receta buscamos rapidez, así que el tomate frito listo es perfecto.
2. Añade los ingredientes complementarios
Si quieres enriquecer tus huevos al plato, ahora es el momento de colocar encima del tomate los ingredientes opcionales:
- Jamón o chorizo: añaden sabor intenso y un toque salado muy sabroso.
- Atún: ideal si buscas una versión más ligera.
- Verduras cocidas: como guisantes, espinacas, champiñones o pimientos, que aportan color y textura.
- Queso rallado: si te gustan los platos cremosos, pon una fina capa de queso sobre el tomate antes de añadir los huevos.
Puedes combinar varios ingredientes, pero procura no sobrecargar el plato, ya que el microondas calienta desde el interior y demasiados ingredientes pueden impedir que los huevos se cocinen uniformemente.
3. Casca los huevos con cuidado
Rompe los dos huevos y colócalos encima del tomate, uno a cada lado del plato o cuenco.
Procura que las yemas queden enteras y no se rompan, ya que la presentación final será más bonita.
Si te gusta el contraste de texturas, deja las yemas sin romper para que queden cremosas.
Si prefieres una cocción más uniforme, puedes pincharlas suavemente con un palillo (esto también evitará que exploten en el microondas).
4. Sazona al gusto
Añade una pizca de sal sobre las claras y un toque de pimienta negra molida.
Si lo deseas, echa también un chorrito de aceite de oliva virgen extra, que realzará el sabor y ayudará a que las claras no se resequen durante la cocción.
5. Cubre el plato
Para evitar salpicaduras dentro del microondas, tapa el plato con una tapa especial o, si no tienes, con un plato llano colocado encima.
No uses papel film ni papel aluminio (no es seguro para microondas).
6. Cocina los huevos
Introduce el plato en el microondas y cocina a potencia media (700W) durante 1 minuto y medio.
Pasado ese tiempo, observa el resultado:
- Si las claras están aún líquidas, cocina 10 segundos más.
- Si las yemas aún están muy crudas y prefieres que cuajen un poco más, añade otros 10–15 segundos.
El tiempo exacto dependerá de tu microondas. Es mejor ir de menos a más, para no pasarte de cocción.
Las claras deben quedar firmes y las yemas ligeramente blandas para que, al romperlas, salga una cremita deliciosa.
7. Presentación final
Cuando los huevos estén listos, sácalos con cuidado (el plato estará caliente) y espolvorea perejil fresco picado o orégano seco.
Puedes añadir un toque final de queso rallado, que se fundirá con el calor residual.
Sirve inmediatamente con pan crujiente o tostadas caseras para mojar en la yema.
Cómo servir los huevos al plato al microondas
Este plato es muy versátil. Puede servirse como:
- Desayuno energético: acompañado de pan integral o tostadas.
- Comida rápida: junto a una ensalada verde o una porción de arroz blanco.
- Cena ligera: con verduras al vapor o una crema suave.
El resultado es un plato sencillo pero reconfortante, ideal para quienes disfrutan de la cocina tradicional pero no quieren complicarse.
Consejos útiles y trucos
- Usa un recipiente adecuado:
Elige siempre un cuenco o plato hondo apto para microondas. Los de cerámica o vidrio grueso funcionan mejor que los de plástico. - Evita que las yemas exploten:
Si no quieres tapar el plato, pincha cada yema con un palillo antes de cocinar. Esto libera el vapor interno y evita que se revienten. - Controla los tiempos:
Cada microondas tiene potencias diferentes. Empieza con 1 minuto y medio, revisa, y añade pocos segundos si hace falta. - No los dejes enfriar demasiado:
Los huevos siguen cocinándose unos segundos después de salir del microondas por el calor residual. Si los dejas reposar demasiado, las yemas se endurecerán. - Para una textura más cremosa:
Añade una cucharadita de nata líquida o leche sobre el tomate antes de poner los huevos. Aportará suavidad y un sabor más rico.
Variantes deliciosas
Aunque la receta básica es espectacular, puedes reinventarla de muchas formas según tus gustos o los ingredientes que tengas a mano.
1. Huevos al plato con queso fundido
Añade una capa de queso rallado (mozzarella, emmental o manchego) sobre el tomate.
Cuando los huevos se cocinen, el queso se fundirá y creará una capa dorada irresistible.
Si quieres un toque gratinado, puedes terminarlo 1 minuto más con grill (si tu microondas lo tiene).
2. Huevos al plato con tomate y jamón
Una versión clásica española.
Coloca jamón serrano en tiras sobre el tomate antes de añadir los huevos.
El jamón se calentará con el vapor del microondas, soltando su aroma y salazón.
Perfecto para servir con pan y un chorrito de aceite de oliva.
3. Huevos al plato con espinacas
Ideal si buscas una comida ligera.
Saltea un puñado de espinacas con ajo (puedes usar las congeladas ya cocidas), colócalas sobre el tomate, añade los huevos y cocina normalmente.
El resultado es un plato equilibrado y muy nutritivo.
4. Huevos al plato con cebolla y pimientos
Si tienes un sofrito de cebolla y pimiento (tipo pisto), úsalo como base en lugar del tomate.
Dará un sabor más dulce y una textura melosa.
Puedes añadir encima unos trocitos de chorizo o jamón.
5. Huevos al plato con ajo y perejil
Una versión simple pero deliciosa.
Antes de poner los huevos, añade al tomate un poco de ajo picado y perejil fresco.
El aroma que desprende al cocinarse es irresistible.
6. Huevos al plato con bacon o panceta
Coloca tiras de bacon o trozos de panceta previamente cocidos o semihechos sobre el tomate.
El contraste entre el bacon crujiente y la yema cremosa es espectacular.
7. Huevos al plato con sobras de guiso o verduras
Si te han sobrado verduras asadas, un trozo de carne o incluso algo de lentejas, colócalo como base antes de los huevos.
En pocos minutos tendrás un plato nuevo y completo, sin desperdiciar nada.
Valor nutricional (por ración aproximada)
- Energía: 230 kcal
- Proteínas: 13 g
- Grasas: 15 g
- Hidratos de carbono: 7 g
- Fibra: 1 g
- Colesterol: 370 mg
Los huevos son una fuente excelente de proteínas de alta calidad y contienen vitaminas A, D, E y del grupo B. Además, aportan minerales esenciales como hierro, fósforo y zinc.
Cómo adaptar la receta
- Versión ligera: usa solo 1 huevo y evita el aceite o el queso.
- Versión proteica: añade atún, pollo cocido o jamón.
- Versión vegetariana: combina tomate, espinacas, champiñones y queso.
- Versión picante: incorpora un poco de guindilla o pimentón picante.
Origen de los huevos al plato
El plato tiene raíces mediterráneas, especialmente en España y Portugal, donde tradicionalmente se cocinaban en cazuelitas de barro al horno o al fuego.
Su popularidad se debe a que es económico, se prepara con lo que hay en casa y siempre sale bien.
Con la llegada del microondas, esta receta se adaptó perfectamente a la vida moderna: conserva su esencia tradicional, pero se prepara en la mitad del tiempo.
Limpieza y conservación
- Si te sobra, puedes tapar el recipiente y guardar en la nevera hasta 24 horas.
- Para recalentar, hazlo solo unos 20 segundos al microondas para que no se resequen los huevos.
- Lava el recipiente en cuanto se enfríe, ya que el tomate y la clara cocida pueden pegarse si se secan.
Ideas de acompañamiento
- Pan rústico o baguette recién tostada.
- Ensalada verde con vinagreta ligera.
- Arroz blanco o cuscús.
- Puré de patatas o patatas al vapor.
- Pisto manchego o verduras salteadas.
Presentaciones creativas
- En cazuelitas individuales:
Sirve los huevos en pequeñas cazuelas de barro o cerámica. Da un aire tradicional aunque estén hechos en microondas. - En tostadas:
Coloca los huevos cocidos sobre una rebanada gruesa de pan y añade un poco de tomate extra. Ideal para desayunos gourmet. - En mini raciones:
Usa moldes pequeños de silicona y cocina un solo huevo con tomate y queso en cada uno. Perfectos para un brunch o aperitivo.
Errores comunes y cómo evitarlos
- Las yemas explotan:
Solución: pincharlas antes de meter al microondas o cubrir con tapa. - Las claras quedan crudas:
Solución: cocina a intervalos cortos de 10 segundos y revisa. - Las yemas se endurecen:
Solución: usa potencia media y menos tiempo. - El plato se seca:
Solución: añade una cucharadita de agua o nata sobre el tomate antes de cocinar.
Conclusión
Los huevos al plato al microondas son una auténtica joya de la cocina práctica:
- Se preparan con ingredientes sencillos.
- No ensucias casi nada.
- Están listos en menos de 5 minutos.
- Son nutritivos, económicos y versátiles.
Además, puedes adaptarlos a cualquier ocasión: desayuno rápido, almuerzo ligero o cena reconfortante.
Con un poco de imaginación y tus ingredientes favoritos, cada versión será diferente y deliciosa.
Así que la próxima vez que no sepas qué cocinar y tengas un par de huevos en la nevera, recuerda esta receta.
